De fe

Estuve despierta toda la noche cuestionando mi fe en la fe.

Es decir, no había tenido yo fe en nosotros todo ese tiempo? Fe de que dejara de detener todo, fe de que me dijera que me quiere...

- Esperá.

- Qué pasa?

- Necesito una señal. O sea, me pediste que tenga fe... pero, mirá... estoy como perdiéndola un poco... así que... necesito una señal.

- Que, como en esas películas viejas sobre religión? Querés una voz del mas allá?

- Sólo decime que te importo, que me elegís a mí. No necesito que se lo digas a todo el mundo... Sólo-- Sólo decímelo a mí.

- ...

- No puedo seguir con esto. Te quiero, pero no puedo.

- Entonces ya está?

- Sí.

Después de que se fuera, lloré por una semana. Hasta que me di cuenta de que yo sí tengo fe. Fe en mí misma. Fe en que algún día voy a conocer a alguien, que va a estar seguro de que me elige a mí.